Porfirias agudas
Ataque Leve: El reconocimiento precoz del inicio de un ataque agudo siempre permite iniciar antes el tratamiento. Algunos pacientes que han experimentado ataques agudos con anterioridad son capaces de reconocer los datos que los alertan sobre la posibilidad de un nuevo ataque de porfiria. En estas circunstancias se recomienda incrementar el consumo de azúcar en forma de frutas, jugos o refrescos y suspender cualquier factor desencadenante, por ejemplo, medicamentos. Frecuentemente los ataques se resuelven con estas sencillas medidas, pero en los casos en los que el dolor aumenta o persiste y el vómito imposibilita tomar líquidos, se recomienda la hospitalización para la administración de glucosa por vía intravenosa.
Ataque Severo: Se deberán administrar altas concentraciones de glucosa por la vena y otros medicamentos para tratar los distintos síntomas que acompañan al ataque, por ejemplo, analgésicos narcóticos para aliviar el dolor y producir sedación leve. El tratamiento específico para los ataques agudos de porfiria es la hemina humana; este compuesto ayuda a reemplazar la deficiencia relativa de hem y favorece la disminución en la producción de porfirinas y ALA/PBG. La hemina, en cualquiera de sus 2 fórmulas disponibles en el mercado, es el tratamiento de elección; si no puede obtenerse de inmediato, debe sustituirse por grandes cantidades de glucosa, y a pesar que el efecto es parecido, los ataques tratados únicamente con glucosa duran más y no protegen al sistema nervioso de probables secuelas. Este régimen se recomienda para las 3 variantes de porfiria aguda.
EN CASO DE REQUERIR NORMOSANG DE MANERA URGENTE FAVOR DE DIRIGIRSE AL APARTADO "¡IMPORTANTE! PERMISO DE IMPORTACIÓN" DONDE SE EXPLICAN LOS PASOS A SEGUIR PARA LA ADQUISICIÓN E IMPORTACIÓN DEL MEDICAMENTO.
Ataque Severo: Se deberán administrar altas concentraciones de glucosa por la vena y otros medicamentos para tratar los distintos síntomas que acompañan al ataque, por ejemplo, analgésicos narcóticos para aliviar el dolor y producir sedación leve. El tratamiento específico para los ataques agudos de porfiria es la hemina humana; este compuesto ayuda a reemplazar la deficiencia relativa de hem y favorece la disminución en la producción de porfirinas y ALA/PBG. La hemina, en cualquiera de sus 2 fórmulas disponibles en el mercado, es el tratamiento de elección; si no puede obtenerse de inmediato, debe sustituirse por grandes cantidades de glucosa, y a pesar que el efecto es parecido, los ataques tratados únicamente con glucosa duran más y no protegen al sistema nervioso de probables secuelas. Este régimen se recomienda para las 3 variantes de porfiria aguda.
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